14 de noviembre de 2011

BODA.

El sentimiento profundo de una madre a su hija:
Estoy segura que estas llena de dichas, esperanzas y felicidad, ese es mi mayor y más grande deseo, hoy y siempre serás lo más importante en mi vida, como lo será para ti el día de tu boda.
No sé expresar mis sentires de otra manera, la emoción de todos estos días me embarga y me ahoga, mi corazón late apresuradamente con solo mirarte e imaginarte. Te casas.
Te imagino y veo llegando al altar, con ese tu vestido blanco como todos tus sueños e ilusiones.
Porque de eso esta echa la vida, con esa mirada tan tuya, radiante, feliz y bella...
Con ese tu rostro transparente, en el cual reflejas tus sentires, te veo rodeada de tules vaporosos, en mis oídos escucho tu música que con tanto amor escogiste.
¿Cómo olvidar esos momentos tan estrechamente compartidos e importantes para ti?
El Curruncho esperándote en la puerta, acompañando tus primeros pasos hasta la mitad de la iglesia.
Tu padre entregándote, tantos recuerdos afloran en mi mente.
No puedo dejar de agradecer el tiempo compartido en tu hogar, ahora ha llegado el momento de despedirme. 
Pronto te esperaran nuevos retos en la vida y buscar nuevos horizontes.
Sé que ahora cambias de situación, cambiaras de lugar, pero en mí.
Nunca cambiaran los sentimientos hacia ti. Serán aun más fuertes.
Sé que el tiempo ha cambiado muchas cosas, pero jamás cambiaran los recuerdos vividos a tu lado.
Que yo siempre guardaré con inmenso amor.
Tú siempre supiste lo que mi corazón siente.
Compartiste mi alegría, mi esperanza, tu comprensión para mí será mi refugio.
Y la ilusión de tu nueva vida será mi estimulo.
Recibe este mensaje como una contribución para que estas épocas que te tocan vivir. Siempre procura que el amor llene tu casa, ten siempre el corazón henchido de ilusiones y el alma radiante de buena fe.
Quédate lo más que puedas en tu hogar, arreglándolo con unas flores, una cortina, un detalle.
Mantén a los que amas cerca de ti. Consérvate siempre abierta, espontánea, autentica y trasparente.
Esa eres tu querida hija.
Esa manera de ser tan sencilla te ha hecho ser valorada y respetada por todos los que te conocen.
Hoy que es el día de tu boda no puedes imaginarte con cuanto agrado deseo que todas tus ilusiones se hagan realidad.
Te ama profundamente tu mama. 

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