NO LLORES.

Si me muero antes que tú, no llores, alégrate de todo lo vivido... No vayas a buscarme a mi tumba, ahí nunca estuvimos. 
Yo estaré siempre a tu lado, con mis hijos, con mis nietos, con mis padres, con mi familia y con todos mis amigos.

Estaré siempre con todos ellos.

También estarán latentes mis fracasos, mis vehemencias y mis errores.

Fui solamente un ser humano, no se aten a mis recuerdos o a ciertos objetos que yo quise.

Siempre habrá un recuerdo mío.

No lloren, no es bueno, pero si quieren háganlo.

Tal vez cuando no se puede dar una expresión hablada.

Solo se puede hablar con los ojos.

Cuando lloramos por alguien que muere.

Es llorar por nosotros mismos.

Lloraremos también porque cuando aún vivía, no le dimos el cariño que podríamos haberle dado.