Me
reciben siempre con una gran sonrisa, me aceptan tal cual soy, no pretenden
modificarme, creen en mí y tienen fe en la verdadera amistad. ¿Qué importante
es saber que puedo contar siempre y en cada momento con ellas? Que sin envidia
reconocen mis valores, siempre hay en ellas una palabra de elogio, de
estimulación, de mucha entrega total y ternura.
Su
ayuda es desinteresada, jamás abusan de la bondad.
Con sus
sabios ejemplos de vida, aprendemos mucho de ellas, cultivando diariamente a
construir la vida y pulir la personalidad y el mejoramiento diario es un
ejemplo a seguir, gozamos de la alegría y llena nuestros corazones de paz,
armonía y contentamiento.
Hoy en
estos tiempos tan difíciles, en el cual ser humano vive...Encuentro en ellas la
conciliación, equilibrio y quietud, se dan cuenta cuando uno está caído y
cuando deseas un apoyo y comprensión.
Tratan
siempre de conocer las dificultades de la vida solo para ayudarte, las que con sus cuidados y
finas atenciones, disminuyen el dolor de la verdadera amistad, siempre están
dispuestas a perdonar con generosidad.
Olvidando
cualquier ofensa, ellas ven siempre las virtudes en sus amigas.
Nos
aceptamos con alegrías, debilidades y luchas, yo tuve la gran suerte de
encontrarlas y descubrirlas.
Ojalá tenga siempre la dicha de conservarlas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario