LA LECCIÓN.

Ten en cuenta que los grandes amores y los grandes logros implican grandes riesgos.

Cuando pierdas, no desperdicies la lección.

Respétate a ti mismo.

Respeta a los demás.

Sé responsable con tus acciones, no permitas que una pequeña disputa dañe a tu persona.

Cuando te des cuenta que has cometido un error, toma acciones inmediatas para corregirlo.

Es bueno que reflexiones acerca de ti, ten siempre tu conciencia tranquila.

Si siempre has actuado con el bien, de que te preocupas.

Abre siempre tus brazos a los cambios, pero tampoco dejes que te atropellen.

Recuerda que el silencio contigo mismo, es la mejor de las respuestas.

Trata de vivir una vida buena y honorable, cuando vengan los años y pienses en el pasado, serás capaz de disfrutarlo por muchas veces.

Un ambiente de amor en tu hogar, es la base de tu vida.

En las discusiones con tus seres queridos, hazlo sobre cualquier tema presente.

No recuerdes el pasado.

Comparte tus conocimientos de buena manera, de esa forma conseguirás la inmortalidad.

Recuerda que la mejor relación es aquella en la cual tu amor por otro, superara lo que algún día tú necesitaras de él.

Juzga tu éxito, para así valorar lo que tuviste que dar para conseguirlo.

Encárate a ti mismo y cuídate, también cuida a los demás.

Todos tienen derecho de ser respetados.