Ser menos apasionada en
querer solucionar en un día; los inconvenientes de la vida.
No intento modificar, ni disciplinar a nadie,
sólo a mí misma.
Es mejor enmudecer, a veces me es difícil adaptarme a ciertos
acontecimientos.
Tengo que ser más sistemática conmigo, para procurar más tiempo
a mis lecturas.
Para mí, son importantes como
la vida misma.
Me ayudan a tonificar mi alma, es como el alimento para mi
cuerpo.
Tengo que hacer buenas acciones para con los demás, salir de la
rutina del hogar, proporcionarme un espacio para ascender.
Debo de ser más reservada, no tomar las cosas con excesiva
rapidez.
Tengo que complacerme de todo lo que me hace feliz y de todo lo
que yo considero dotado de hermosura.
Sólo tengo que colmarme del suficiente discernimiento,
conocimiento, entendimiento y prudencia.
Aunque mi opinión, sea contraria.
Tener mucha fortaleza, para asumir esta nueva etapa que se va
acercando.
Que perciba con el don de la sabiduría, discernir claramente.
Que sepa instruir con mi ejemplo y entender a los que amo.
Y que tal vez se ejerciten
en algo, a través de mis epístolas.
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